ElPensador.- «Nuestra posición es clara… Hemos dicho que la migración no es un derecho humano. Los países tienen el derecho de determinar los requisitos de ingreso para los ciudadanos extranjeros».
Con estas palabras, el subsecretario del Interior, Rodrigo Ubilla, explica un nuevo paso del gobierno de Sebastián Piñera en la senda aislacionista y nacionalista inaugurada por Donald Trump, al retirarse del pacto migratorio de las Naciones Unidas.
El pacto -no un tratado- significaba el compromiso de los países que suscriben de evitar las discriminaciones arbitrarias de los Estados hacia quienes buscan nuevos destinos en otros países y aborda la forma de proteger a las personas que migran, integrarlos en nuevos países o devolverlos a sus países de origen.
Aunque no es vinculante, el pacto ha encontrado una fuerte resistencia por parte de gobiernos que comparten un tinte nacionalista, como Estados Unidos, Austria, Hungría y Polonia. Austria, por ejemplo, que tiene un gobierno con participación de ultranacionalistas ha desarrollado una política marcadamente islamofóbica, cerrando las fronteras a migrantes y cerrando mezquitas. Lo mismo en Polonia, donde un gobierno con una tendencia de ultraderecha populista ha impedido la entrada de más migrantes musulmanes.
La negativa de Chile a firmar refleja una postura endurecida hacia los migrantes cuya población se ha multiplicado por cinco en los últimos 30 años, en medio de las afluencias de Perú, Venezuela, Haití, República Dominicana y Colombia, entre otras naciones latinas.
Amnistía Internacional dijo que la decisión era «alarmante». «Chile fue una parte activa de las negociaciones de este pacto y fue considerado como uno de los estados que favorecieron su implementación», dijo Ana Piquer, directora ejecutiva de Amnistía en Chile. «La decisión de último minuto de no participar en la cumbre de Marruecos parece un paso atrás en su promesa de otorgar derechos a los migrantes».
Esta es la segunda gran decisión que aleja a Chile de las tendencias de la ONU. En Septiembre ya se había restado de los Acuerdos de Escazú, en que se trataba de apoyar las medidas gubernamentales para proteger el medio ambiente y combatir el cambio climático.
Preguntas para contestar
– ¿Por qué Chile se alinea con posturas ultranacionalistas?
– Si se niega el derecho establecido en el artículo 13° de la Declaración Universal de los Derechos Humanos (“Toda persona tiene derecho a circular libremente y a elegir su residencia en el territorio de un Estado” y “Toda persona tiene derecho a salir de cualquier país, incluso del propio, y a regresar a su país”), ¿podría estar en peligro el reconocimiento de otros derechos?