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Régimen de Maduro intenta asfixiar a la oposición

Por Simón Carreño Rodríguez.- La reciente ofensiva del régimen de Nicolás Maduro contra la Asamblea Nacional forma parte de la estrategia de aplastamiento a la oposición que se orquestó con el engaño del 30 de abril, que llevó a un intento de alzar a una parte de las Fuerzas Armadas.

El entramado permitió a las autoridades instaladas dar apariencia verosímil a las acciones judiciales de los días siguientes, que terminaron con el fin de la inmunidad parlamentaria de diez congresistas.

En días previos, también se allanó la casa del líder opositor Leopoldo López, quien fue liberado de su arresto domiciliario el 30 de abril pasado por funcionarios de la policía política del régimen, el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional, SEBIN.

La ofensiva más reciente, que quita inmunidad a los miembros de la Asamblea Nacional, fue seguida de la detención del vicepresidente de la cámara legislativa, Edgar Zambrano, hecho que  ha sido condenado por el Grupo de Lima y varias instancias internacionales.

La oficina de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, encabezada por Michelle Bachelet, exigió su liberación a través de un comunicado: “Pedimos la inmediata liberación de Edgar Zambrano, diputado de la Asamblea Nacional. Instamos a las autoridades a que detengan los ataques contra la Asamblea Nacional y sus miembros”, señala la instancia en una declaración.

También se sumó al secretario general de la ONU, Antonio Guterres, quien también expresó su preocupación por la detención del parlamentario, y afirmó que el arresto de opositores complica los intentos por lograr una salida negociada a la crisis política. “El secretario general está preocupado por la detención de otro legislador de la oposición por parte de las autoridades venezolanas”, señaló el vocero de la secretaría general, Farhan Haq.

Mientras, otros legisladores intentan buscar refugio en diversas embajadas de países vecinos en Caracas. Uno de ellos, Richard Blanco, del partido Alianza del Pueblo Valiente, entró este jueves en la legación argentina. Los diplomáticos trasandinos afirmaron que “él es un huésped”.

También la diputada Marianella Magallanes, que buscó asilo en la embajada de Italia el miércoles.

El jefe de gabinete del presidente encargado Juan Guaidó, Roberto Marrero, también había sido arrestado en marzo pasado, y se mantiene privado de libertad.

Por ahora, sin embargo, las medidas represivas del régimen no han afectado a Guaidó directamente, sino a su círculo, lo que revela una estrategia que busca ahogar al líder opositor, quitarle el oxígeno a su movimiento, con la certeza de que ya ha pasado el tiempo de una intervención militar extranjera y entre los países que han desconocido a Maduro ninguno se ha mostrado a favor de esa vía.

Así, la estrategia de trabar a la oposición, con represión, miedo, aislamiento y la generación de contenidos que inventan un enemigo externo, empieza a endurecerse cada vez más, en un camino que paso a paso se parece a la Cuba de Fidel Castro