ElPensador.io.- “Estoy huyendo de Venezuela, mi país. No tengo allá cómo darle una educación a mi hijo, no tengo cómo darle alimentación”. Es el testimonio de una de los cerca de 500 venezolanos que se encuentran varados desde hace tres días en el complejo fronterizo de Chacalluta, en la frontera entre Chile y Perú.
Los inmigrantes forman parte de una oleada general, anunciada a través de medios peruanos, que suma entre enero y mayo de este año el paso de 59 mil venezolanos desde Perú a Chile, a razón de 400 personas diarias.
Estimaciones desde el Perú indican que el 8% de los venezolanos que intentan pasar a Chile son rechazados, principalmente debido a la carencia de visa de trabajo o un fondo de US$1.000 que deben acreditar en la frontera.
Las condiciones en Chacalluta son complejas, debido a que no es un puesto habilitado para mantener a las personas. Las noches son extremadamente frías y no hay acceso a alimentos. Incluso, se ha relatado que se debió atender ya un parto en el lugar.
La embajadora del presidente encargado de Venezuela en Chile, Guarequena Gutiérrez, informó esta semana, a través de un comunicado, que los venezolanos que quieran ingresar a Chile pueden solicitar la Visa de Responsabilidad Democrática, que otorga el gobierno chileno, a través de cualquiera de las legaciones diplomáticas en el mundo. “La única condición que debe cumplir el solicitante es que debe estar legal en el país donde realizará el trámite”.