En el fútbol se debería aprender del espíritu demostrado en los juegos paralímpicos, donde la actuación de los deportistas chilenos destacó, afirma el periodista Juan Francisco Ortún.
Por Juan Francisco Ortún.- Tras una nueva fecha clasificatoria para el próximo mundial de fútbol, vemos que la cosecha de puntos fue paupérrima. Ni una sola unidad en dos compromisos que se prepararon con la antelación debida.
En el fútbol y en el deporte en general se puede ganar o perder, pero hay maneras y formas para ello. El resultado de los cotejos no es lo que más indigna: es la actitud en el campo de juego la que molesta, “mojar la camiseta” le dicen en el barrio, el pundonor, la vergüenza, la dignidad… todo eso estuvo lejos en el desempeño de nuestras figuras.
Para muchos, estos confrontes hicieron pasar inadvertidos la participación de otros chilenos que sí lo dieron todo y pudieron colocar el nombre de nuestro país en el podio de los ganadores. Un grupo al que, venciendo muchas adversidades, se les puede dar el calificativo de estrellas, participando en una competencia exenta de danzas de millones y que no tiene el boato de un mundial de fútbol, pero que, tal vez, pueda ser más loable que el fútbol.
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La participación del Team Chile en los Juegos Paralímpicos París 2024 fue histórica. Seis medallas de oro y 14 diplomas se trajeron nuestros compatriotas que participaron y otros, que no obtuvieron preseas, también tuvieron una actuación destacada. No demos nombres, reconozcamos al grupo completo que nos hicieron madrugar a quienes sí teníamos interés en su participación.
De estos deportistas podrían aprender los hoy consagrados que intentan clasificar a un mundial; de estos aguerridos atletas podrían darse un baño de humildad nuestras estrellas del fútbol y, tal vez, así, podrían mejor entender lo que es el sacrificio.
Quizá con un prisma diferente, comprenderían que la modestia también conduce al éxito; de ellos, entender que también tienen sueños de victoria; nuestros futbolistas de la selección podrían darse cuenta de que lo más importante en la vida es ser feliz y hacer feliz a un país, superando todos los obstáculos que la vida les coloca en el camino. Para que aprendan.
Juan Francisco Ortún Quijada es periodista y académico de la U.Central