Por Alvaro Medina J.- A pocos días de que Nicolás Maduro asuma un nuevo período presidencial en Venezuela, Braulio Jatar (#PremioElPensador2018 por su lucha por la Democracia) analiza el significado de ese hecho político, del futuro de su país, de su situación como preso político, y de la esperanzas que manifestara a ElPensador.io en nuestra última entrevista hace casi cuatro meses.
Braulio, fuiste nominado para el Premio Oswaldo Payá. ¿Cómo te sientes respecto a esa posibilidad y lo que representa?
Primero debo manifestar mi inmensa satisfacción con el “Premio a la lucha por la Democracia” que me han otorgado ustedes desde El Pensador.io. Mi familia, desde la generación de mis abuelos, han hecho de los valores democráticos la razón de ser de nuestras más importantes batallas, así que tal distinción la recibo como un reconocimiento a tres generaciones y me tiene muy emocionado.
Con relación a la nominación para el Premio Oswaldo Payá, siendo uno que lleva el nombre de un extraordinario cubano, también luchador por los derechos políticos, es importante que se sepa que mi familia materna es cubana, y mi abuelo Cruz Alonso era un progresista que siempre ayudó a todos los movimientos democráticos en nuestro continente. El abuelo nació en las Islas Canarias y emigró a Cuba siendo un muchacho, se hizo empresario primero con una modesta bodega que lo llevó a tener el hotel San Luis en La Habana, un imponente inmueble, que le dio cobijo sin distinción a luchadores democráticos de Republica Dominicana, Venezuela y Chile, entre otros. En muchos casos los huéspedes solo pagaban cuando y cuanto podían. Mi padre era de esos, siendo un exilado político venezolano de la dictadura de Pérez Jiménez en Cuba, se hospedó y luego contrajo matrimonio con la hija del dueño: mi madre. Esta nominación es un hermoso regalo familiar. Estoy muy agradecido con el gesto de Juan Carlos Vargas, Juventud LAC y Fundación para la democracia al promoverme para tan hermoso premio.
¿Cómo ha tomado el gobierno venezolano esta nominación?
No tengo información en ese sentido.
Habiendo dedicado tu vida a la información, ¿cómo tomas la alarmante cifra de periodistas detenidos o muertos en Venezuela?
El periodismo se ha convertido en una profesión de altísimo riesgo en el mundo, lógicamente en países donde la arbitrariedad se impone por encima del estado de derecho, se hace más evidente la vulnerabilidad de quienes tienen el trabajo de revelar la verdad. En los Estados forajidos, fallidos al igual que en toda mafia, se castiga muy severamente la delación, la información que pone al descubierto el tramado criminal. La omertá, ese código de silencio de la mafia común en las zonas del sur de Italia, como Sicilia, Calabria y Campania, se impone sobre toda la sociedad. Los periodistas valientes pagan un precio muy alto por cumplir con su compromiso moral de informar.
Nicolás Maduro va a asumir un nuevo período el 10 de enero. ¿Es legítimo este período?
Los países más desarrollados del mundo se pronunciaron a tiempo fijando posición sobre la farsa electoral del 10 de mayo, en consecuencia, sin elecciones legítimas no hay periodo constitucional. El proceso convocado por la Asamblea Nacional Constituyente está viciado ab originae. La Constituyente no es reconocida por haberse constituido contrariando la Constitución, por lo que siguiendo el aforismo jurídico de que “todo fruto producto de un árbol envenenado, está también envenenado” es poco lo que se pude agregar. Por otra parte el simulacro electoral, no contó ni con auténticos partidos de oposición ni mucho menos con genuinos candidatos, por eso, la comunidad internacional lo calificó de inexistente.
El Grupo de Lima dijo que iba a establecer sanciones contra Venezuela a partir de esa fecha, pero no las definió. ¿Qué crees que debiera ejecutar y qué efectividad podría tener?
Estados Unidos (EEUU), Canadá y Europa han sido más severos en sus castigos a funcionarios que los países del “Grupo de Lima”. Hasta ahora este conglomerado de países, se ha limitado a hacer simples pronunciamientos pero no han tomado ninguna medida en concreto. Entiendo que México con López Labrador sigue en el grupo. Eso es interesante, ya que se pensó que lo abandonaría. No sé qué consecuencias puede traer en un sentido u otro que el nuevo gobierno mexicano se mantenga dentro del grupo.
El pueblo venezolano, mermado por el éxodo y “derrotado” al no participar en las elecciones que finalmente dan un nuevo período a Maduro… ¿se rindió?
La oposición venezolana tiene veinte años batallando, han usado todo tipo de estrategias para producir el quiebre del proceso chavista. En muchos casos las derrotas traen deserciones y desánimos. Yo lo que veo es que mucha gente se ha cansado de batallar y han decidido, algunos, refugiarse en países, y otros, en sus hogares, pero también percibo en el común de la gente, que este proceso está agotado por lo que más temprano que tarde colapsará junto con el país.
Hace unos meses planteabas una gran esperanza sobre el rol de Michelle Bachelet en el futuro de Venezuela. Pero después de todo este tiempo como Alta Comisionada de los Derechos Humanos en la ONU no ha habido ningún avance en la posibilidad de visitar Venezuela o enviar una misión que verifique la situación de los derechos humanos. ¿Mantienes esa esperanza?
No conozco problema que no tenga solución, en las leyes del espíritu se tiene como una de las más importantes la denominada “Ley del proceso” que fundamentalmente señala que la paciencia y la perseverancia son el camino al éxito. Paciencia y perseverancia son necesarias para producir los resultados, nadie dijo que la carrera de la (ex) Presidenta (de Chile) en el caso de Venezuela es de velocidad, por el contrario es una de aliento. Ella ya ha logrado que la inviten: nunca antes el gobierno había aceptado invitar a ningún organismo internacional de la talla de la ONU, OEA e inclusive la OIT, así que el primer paso necesario para avanzar ha sido dado. La Alta Comisionada se ha reunido con gente de la oposición y ha advertido que analiza las condiciones de la invitación. Entiendo que ella está queriendo poder cumplir con el mandato de la ONU sin restricciones de parte del gobierno de Maduro. No solo mantengo mi esperanza, sigo estando convencido que la doctora Bachelet jugará un papel importante en el desenlace en la Venezuela del futuro. De igual forma estoy convencido que el gobierno del presidente Sebastián Piñera seguirá haciendo todo tipo de esfuerzos para que Venezuela vuelva al sistema democrático.