Nuestro lector, el ingeniero Luis León Cárdenas, alerta sobre la relación entre el Covid-19 y el cáncer de mama, como una variable necesaria ante políticas de prevención.
Sr. Director:
Habiendo sido octubre el Mes Mundial de Concientización sobre el Cáncer de Mama, gran parte del discurso público, tanto de autoridades como de profesionales de la salud, tiende a centrarse en su importante detección y tratamiento precoz, pero en cierto desmedro de su tantísima más importante prevención en primera instancia.
Aparte de las tradicionales medidas controlables (obesidad, sedentarismo y otros), sistemáticamente se omite la alta relevancia de la infección por Covid-19, ya reiterada, sobre la que no está habiendo un control preventivo significativo; siendo un virus pro-cancerígeno [«Causal effects of COVID‐19 on cancer risk …», J. Med. Virology, 2023] que estaría detrás del importante aumento de la incidencia de cáncer a nivel mundial [«Oncogenic potential of SARS‑CoV‑2 – targeting hallmarks of cancer pathways», Cell Comm. & Signaling, 2024] y, en particular, del de mama [«Has the COVID-19 pandemic resulted in more advanced breast cancer? …», ANZ J. Surgery, 2024].
Es insuficiente la explicación de que se trataría simplemente de falta de control médico regular, cargando la responsabilidad a las pacientes. Ante su contagio aéreo, urge que las autoridades normen medidas de ventilación (CO2 < 550ppm) y filtración (MERV-13 > 6ACH) en recintos interiores. La causa por el aire limpio interior debiera ser promovida por un gobierno feminista y asociaciones afines; por todas… y todos.
Atte.,
Luis León Cárdenas Graide
Ingeniero Civil en Computación, Universidad de Chile Diplomado en Ciencia e Ingeniería de Datos, DCC, Universidad de Chile