Por Carlos Linares.- El contexto generado por la pandemia ha propuesto un enorme desafío de transformación y adaptación tecnológica para la mayoría de las profesiones y oficios, empujándonos a asumir, queramos o no, una nueva forma de trabajar.
Los cambios son inevitables y así como el mundo evoluciona constantemente, las empresas también deben hacerlo para mantener su posición en el mercado. Para ello, deben por el foco en la adaptación de su cultura organizacional, debiendo realizar los cambios que sean necesarios. Sin embargo, en el tránsito a un nuevo tipo de organización existen algunos obstáculos que sobrepasar. Toda transformación implica abandonar nuestra zona de confort, lo que significa dejar atrás algunos hábitos y adoptar unos nuevos. Otro factor que también es relevante, es algo muy simple, me refiero al miedo a lo desconocido.
Para hacer frente al desafío que propone el teletrabajo, es imprescindible que las organizaciones incorporen todas las herramientas tecnológicas disponibles, desarrollando e incrementando las habilidades requeridas para “navegar” y tener éxito en esta nueva normalidad. Pero la tarea no es sencilla en el actual contexto. Hoy la mejor herramienta para adaptar, actualizar y reconvertir una empresa es la capacitación a distancia. Su metodología e-learning y el constante desarrollo tecnologías de aprendizaje, ayudarán a las empresas a marcar la diferencia en un mercado voraz, potenciando la productividad de las personas, los equipos y las organizaciones.
Es preciso comprender que este cambio tan necesario se logra a través del conocimiento, y que debemos renovarnos en pos de una mejor y más eficiente forma de trabajo. En gran parte, el futuro de lo laboral está en manos de las organizaciones, pero también lo está manos de quienes son los responsables de formar las habilidades que permitirán reconvertir la cultura de cada organización.
Carlos Linares es ingeniero, diplomado DGA y Director General en Edutecno