Sr. Director:
Al ser entrevistado en el último capítulo de su programa Bad Boys, el ex-candidato presidencial Franco Parisi afirmó: «Yo quiero que le vaya bien a Chile. Yo no tengo ninguna sociedad allá, yo no tengo nada en Chile, absolutamente nada. Solo gente que me odia, pero aparte de eso, yo no tengo nada en Chile».
Se equivoca, pues tuvo adherentes políticos, una familia que dejó atrás con niños, una sustancial demanda por pensión alimenticia y un botín de reembolso por votos con la que nuestros tributos le ayudarán a cubrir buena parte de ella, lo que se le debiera retener en una próxima actualización de la ley «papito corazón».
Ignoro si le odiarán quienes sufrieron su abandono o si ello les valga siquiera la pena. Yo, al menos, no le odio; que cumpla lo que debe, que no dañe a nadie y que le vaya bien allá dónde alguien le quiera.
Atte.,
Luis León Cárdenas Graide, Ingeniero Civil en Computación, Universidad de Chile
En un nuevo Alejandrario, Alejandro Félix de Souza repasa las virtudes de la moral kantiana…
“Se requiere que la derecha ordene sus liderazgos, construya unidad y claridad de quienes integran…
La historia no se repite, y las supuestas repeticiones son una caricatura, un remedo, dice…
El académico Fernando de la Cuadra analiza la trama bolsonarista detrás el atentado a la…
Joaquín Mora Valles fue uno de los 13 competidores chilenos en el Mundial de Ajedrez,…
Es probable que el triunfo de Trump sea la escritura en la pared de la…